Hacía tiempo que tenía ganas de encontrar un sitio especializado en cupcakes y tartas tan mono como éste. He encontrado un pequeño paraíso en Barcelona al cual pienso acudir todas las veces que necesite una sobredosis de dulce. A pesar de que este templo de los cupcakes tiene un éxito brutal (todas las veces que he ido está lleno de gente, y no me extraña), me permito presentaros a todos los que todavía no lo conozcáis a Cup&Cake Barcelona (http://www.cupcakesbarcelona.com/).
De pura casualidad andando por el centro de la ciudad topé con una tiendecita pequeña pero adorable, en calle Tallers número 79. Y allí nació el amor. Allí me enamoré perdidamente de este rinconcito lleno de pastelitos (o no sé si llamarlos "obras de arte") increíblemente buenos. Pues resulta que esta tienda es la pequeña, puesto que la grande y oficial está en la calle Enrique Granados, 145 y es una tienda especialmente dedicada a vender cupcakes de muchiiiiisimos sabores distintos (os dejo el link de su carta menú de cupcakes: http://www.cupcakesbarcelona.com/menu/) y todos ellos hechos artesanalmente y con mucho amor, puesto que cuando pruebas uno de ellos se nota ese sabor único que tienen los dulces elaborados por gente apasionada de la repostería.
El local es muy mono, acogedor, y hacen un café % ecológico buenísimo :) Pero sin duda la estrella de la casa como su nombre indica con los cupcakes, que debo reconocer que aunque no haya probado demasiados, estos me han robado el corazón. Son muy jugosos, y extremadamente dulces. El primer día, ante la sorpresa de encontrar el sitio y la emoción al mirar la vitrina, no supe bien bien que elegir, así que opté por una mezcla de las que no falla nunca, unos cupcakes de plátano y chocolate. Qué decir... no hay palabras. La crema estaba tan tiernecita y dulce, y el bizcocho tan chocolateado pero suave a la vez... mmmmmmmmmmm!
La segunda vez que me planté allí (básicamente al cabo de días), ya iba más preparada a llevarme un cargamento, pero volvieron a sorpenderme. La variedad era mucho más amplia que la vez anterior. Unos red velvet de infarto, nutella, crema catalana, menta, turrón... Y qué decir de las decoraciones... No sabía cuál era el más mono ni cuál el más delicioso. Por no hablar de las tartas, galletas y cronuts rellenos (sí, habéis oído bien, CRONTUS RELLENOS)...
Ante la indecisión permanente, tuve que decidirme por algo y rápido, así que no podía fallarle a mi querido carrot cake con crema de queso, y no fue una buena elección. No lo fue porque creo que me gustó tanto que repetiré cada vez que pase por allí. Pero qué bueno estaba... Jugoso, dulce y con una crema queso suave que se funde en la boca.
No se puede describir tanta felicidad en palabras y por un blog, así que os recomiendo que si sois unos apasionados de los cupcakes o de cualquier otro tipo de pastelito dulce, os acerquéis a esta cucada de local, vale la pena al 100%. Merecía a pena escribir un pequeño post sobre Cup&Cake Barcelona, pero merece más la pena ir a probar sus creaciones :)
Besitos!
Dulce Amarena